Llegó julio.
El mes 7.
Mi mes favorito.
Y con ello inauguramos los escritos veraniegos.
Refrescantes como caña🍺 en tardeo madrileño.
Y este post, ya te aviso, no podría escribirlo en inglés.
Porque para entenderlo tenés que conocer la baraja española.
Jugando al truco —el "mus" argentino— me ha tocado no una, ni dos, ni tres... sino cuatro veces seguidas el Ancho de Espadas.
Sí, la carta más valiosa del mazo.
Me picó la curiosidad.
Le pregunté a la IA cuáles eran las probabilidades estadísticas de que ocurriera algo así.
1 en 31.640.
Sí, lo leíste bien.
Y eso no es todo.
En la mano anterior a mis cuatro "anchos", le tocó a mi compañera.
Cinco veces seguidas, entre los dos.
Entonces me pregunté:
¿Qué tan diferente es estadísticamente que te toque 5 veces seguidas en vez de 4?
Ya aquí viene lo interesante porque cada evento adicional multiplica la improbabilidad.
La respuesta es casi poética:
Cada mano adicional con el Ancho de Espadas reduce la probabilidad a solo un 7,5% de la probabilidad anterior.
Es decir: que te toque 5 veces seguidas es 13 veces más improbable que te toque 4.
¿Que locura no?
Esta anécdota me recordó algo que hablamos la semana pasada:
la sensación de que hay un guionista del vivir.
Un autor medio loco, medio sabio, que nos hace caminar por líneas torcidas que solo mucho después entendemos.
Un George Lucas en su ópera espacial que mezcla azar y sentido con precisión quirúrgica.
Y uno que otro Darth Vader.
¿Creés que hay alguien ahí arriba?
Pulp —una de mis bandas favoritas de mi adolescencia— suena ahora en mis auriculares con "Something Changed":
I wrote the song two hours before we met
I didn’t know your name or what you looked like yet
Life could have been very different but then...
Something changed.
Y me acuerdo de este tweet que vi el otro día en X:
“Me parece una pérdida de tiempo no enamorarse en primavera en Madrid.”
No sé si hay un plan.
Pero sí sé que hay cosas que no pueden explicarse solo por datos ni probabilidades.
El cisne negro🦢
Taleb lo explicó con su famosa teoría del Cisne Negro:
Eventos improbables, inesperados, con gran impacto… que después racionalizamos como obvios o inevitables.
Vivimos queriendo controlar todo, creyendo que con planificar basta.
Pero lo más importante —lo que cambia el curso de las cosas— suele escaparse a nuestros cálculos.
A veces la vida te da 4 anchos de espadas seguidos.
A veces, una canción te encuentra cuando la necesitás.
A veces es hoy.
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Santiago⚡️| crea.entrena.construye
Escrito durante el veranito a la española
PD: esta semana escribí en PM sobre el arte de competir:
Resumiendo:"te has enamorado en la primavera de Madrid.
Por mas jugadas con un Macho de Espada(a lo argentino),no te garantiza ganar,las posibilidades segun IA disminuyen,solo depende de la habilidad de quien lo tenga y lo sepa jugar(inteligencia,habilidad, condiciones).
Lo improbable existe,es cuestion de seguirlo y hacerlo realidad
Andás con suerte se me hace....